Sumario: | El cultivo de Palma Africana en Colombia surgió en la década de los sesenta como un nuevo renglón de producción, con un crecimiento sostenido por los factores políticos y socioeconómicos que lo favorecieron y estimularon. En efecto, a pesar de utilizar tierras marginales poco productivas, muy pronto se convirtió en cultivo empresarial y en la oleaginosa perenne más eficiente y rentable del país.
En 1992 el área plantada con Palma Africana la colocó en quinto lugar dentro de los cultivos perennes, después de Plátano, Cada Panelera, Cada de Azúcar y Cacao. Sin embargo, su importancia socio-económica sobresalió en los siguientes aspectos: la participación del valor de la producción del aceite crudo de palma alcanzó el 4,5% del total agrícola, cubrió el 5.6% de la superficie total financiada por Finagro y tuvo igual participación del crédito otorgado para perennes. La agroindustria de palma africana contribuyó con el 1.2% del producto interno bruto en los últimos años.
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