Sumario: | Es claro que la producción de leche de calidad —higiénica, composicional y sanitaria— es una de las
principales formas que garantizan la rentabilidad y la eficiencia para todos los actores de la cadena
láctea. La puesta en práctica de las acciones mencionadas en la guía “Calidad de la leche: garantizar su
producción en la finca” es clave para que los ganaderos puedan mantener y mejorar su productividad.
Así mismo, el correcto monitoreo de los indicadores de calidad en tiempo real asegura que se apliquen
de forma oportuna las acciones de mejora que se deban tomar para solucionar problemas en la finca
o problemas de acopio. Ello incluye la realización y la correcta interpretación de los análisis o pruebas
realizados en la finca, en los centros de acopio y en los laboratorios de referencia. Estos análisis permiten
identificar puntos críticos que las organizaciones y los productores deben corregir y controlar para
mejorar y mantener la calidad de la leche y, consecuentemente, obtener mayores ganancias.
|