Summary: | El control de plagas y enfermedades tradicional se ha enfocado en el uso de productos
químicos en un amplio espectro de cultivos; sin embargo, con el transcurrir del tiempo
se ha demostrado que la implementación de estas tecnologías ha resultado en serios
problemas de contaminación de suelos, aguas, aire y productos agrícolas debido a la
alta residualidad, toxicidad y estabilidad de las moléculas químicas usadas.
Ante este panorama, el control biológico ha surgido como una alternativa más sostenible para
el control de problemas fitosanitarios y plagas en muchos cultivos con resultados exitosos.
No obstante, debido a las limitaciones tecnológicas para su producción y formulación y el
modo de acción más lento en comparación con los plaguicidas químicos, los bioplaguicidas
siguen teniendo una porción muy pequeña del mercado mundial de plaguicidas.
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