Summary: | Las hortalizas, según Riobó y Marín (2002), derivan su importancia como
alimento gracias a su contenido de vitaminas y minerales. Además, el
usualmente alto contenido de fibra dietaria contribuye a un normal funcionamiento intestinal. Por el contrario, los contenidos de proteínas son prácticamente nulos y el valor energético es bajo; de ahí la necesidad de elaborar
una dieta balanceada que combine otros alimentos junto con las hortalizas
para suplir los requerimientos de nutrientes de un organismo sano.
Como la tendencia actual a nivel mundial es el alto consumo de alimentos energéticos de bajo valor nutritivo, lo cual se traduce en un aumento en
la prevalencia de enfermedades cardiovasculares, cánceres y obesidad, la
Organización Mundial de la Salud (OMS) estableció la campaña internacional denominada ‘5 al día’, que reúne actualmente a 40 países, en los que
promueve aumentar el consumo de frutas y hortalizas.
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