| Summary: | La historia reciente muestra que en Colombia se ha prestado suficiente atención al desarrollo tecnológico en el sector agropecuario y que, por el contrario, ha sido víctima de diversos prejuicios implícitos en la justificación de muchas medidas de política económica. Es un país subdesarrollado, se razona, la mano de obra es abundante y no se deben promover técnicas intensivas en capital. En consecuencia, no se estimula el uso de insumas químicos y se abandonan el desarrollo de la mecanización agrícola, con lo cual la producción interna es costosa, no compite en el exterior y el país queda abocado a una situación en la cual es creciente el gasto de divisas para suplir una oferta doméstica casi estancada.
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