Sumario: | En los años 40 el país contaba aproximadamente con dos millones de
cabezas de ganado Blanco Orejinegro (BON). Según los últimos censos, solo quedan 2.866 bovinos de esta raza, representando el 12% de
la población de razas criollas colombianas, pese a que el Decreto de
1939 ordenaba que por lo menos el 25% del hato de cada sistema de
explotación ganadera tendría que ser de animales criollos (Martínez,
1999). De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la
Agricultura y la Alimentación (FAO), existen dos razones por las cuales
estas razas deben conservarse: 1) el estado de amenaza medido según
la disminución del hato; y 2) el valor o mérito genético por cuanto una
población puede tener características de interés económico y zootécnico (FAO, 2002).
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