Summary: | Las prácticas aplicadas en la agroforestería se remontan posiblemente al fin de la era nómada del hombre, en donde el homohabilis decide establecerse por tiempos
prolongados o indefinidos en una región, con el propósito de combinar su destreza en la caza, con sus nuevos conocimientos agrícolas. Es entonces cuando, y sin saberlo, el hombre primitivo da inicio a la competencia entre la explotación de la tierra y su medio ambiente aparentemente indómito. La historia nos enseña que los pueblos primitivos y aborígenes hicieron que esta competencia fuera leal; es decir, se ocuparon de armonizar sus actividades productivas, con su entorno, sin mayor motivación que el amor y el arraigo por la madre tierra. Sin embargo, y no se sabe a ciencia cierta en que etapa de la "evolución" de la "civilización", el hombre en la explotación de sus sistemas de producción y en su afán de enriquecerse, inclinó la balanza hacia lo económico
en detrimento de Jo ambiental y ecológico.
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